¿Sabes cuántas calorías se pueden llegar a quemar en un día? La realidad es que cada persona tiene unas necesidades concretas de calorías para que su organismo pueda funcionar correctamente.
Para comprender el resto del artículo, lo primero tienes que saber es qué son exactamente las calorías. Pues bien, las calorías son, por un lado, unidades de energía térmica y, por otro lado, una unidad de medida con la que se calcula el contenido energético de los alimentos, y con esto, la cantidad de energía que recibe el cuerpo de una persona al consumirlas.
Si te interesa conocer más sobre el gasto calórico, ¡sigue leyendo! Te contamos todas las variables que se suelen tener en cuenta.
Un cálculo personal e intransferible
La cantidad de calorías que necesita cada persona es un dato totalmente personal e intransferible, ya que, además de tu metabolismo basal, debes tener en cuenta una serie de factores, como por ejemplo tu estilo de vida, así como el nivel de actividad física que realizas al día.
Como hemos mencionado, el primer factor que debes tener en cuenta es el metabolismo basal, es decir, la cantidad de energía que necesita tu cuerpo estando en reposo, para mantener las funciones básicas del organismo como, por ejemplo, respirar. El siguiente factor que hay que añadirle es el de la actividad diaria. Por ejemplo, si tienes un puesto de trabajo en el que estás sentado mucho tiempo y haces poco ejercicio, las necesidades calóricas serán mucho menores que las de una persona con un trabajo activo y que hace ejercicio con regularidad.
Para que lo veas más claro, te lo explicamos con un caso de ejemplo:
- Un joven adulto de entre 20 y 25 años con un estilo de vida activo y que realiza ejercicio de manera regular tendrá unas necesidades calóricas de entre 1.800 - 2.200 calorías por día. Sin embargo, si esta misma persona tiene un trabajo sedentario y no practica deporte de manera tan activa, las necesidades calóricas serán unas 1.400 - 1.800 calorías.
Como has podido comprobar, existe una gran diferencia entre dos personas de la misma edad dependiendo tan solo de su estilo de vida. Por ello, mantenerte activo y llevar una dieta equilibrada es muy importante.
Hoy en día, parece casi imposible seguir la rutina del día a día y, además, tener tiempo para hacer deporte. Al ser un tema tan importante para tu salud, te animamos a ahorrar tiempo en la cocina y dedicar más tiempo al ejercicio. Te explicamos cómo puedes hacerlo.
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¿Es conveniente contar calorías?
En ocasiones, puede ser interesante aprender a contar calorías para así ser más conscientes de nuestra alimentación. De esta manera, podrás adaptar la dieta al objetivo que estás buscando, como aumentar la masa muscular o adoptar un estilo de vida más saludable. Sin embargo, lo más importante es consultarlo siempre con un profesional.
Además, contar calorías no debe convertirse en algo rutinario ni tampoco alargarse durante mucho tiempo, ya que se considera un factor de riesgo para desarrollar un trastorno de conducta alimentaria, en especial cuando lo enfocamos a la restricción calórica.
¿Son todas las calorías iguales?
Si te preguntas si todas las calorías son iguales, la respuesta es rotundamente no, puesto que son una unidad de medida que sirve para calcular la energía de los alimentos y no la calidad o su composición. De esta manera, su impacto en la salud será diferente dependiendo de su origen.
Para que sea mucho más fácil, te lo explicamos con un ejemplo: dos alimentos diferentes con una misma cantidad de calorías como una galleta industrial y una manzana, aunque tengan la misma energía, no son iguales. La manzana te aportará mucho más que un ultraprocesado como la galleta industrial, pues esta fruta contiene gran cantidad de vitaminas, minerales y micronutrientes que el organismo necesita para su correcto funcionamiento, mientras que la galleta no los tiene.
Por todo esto, lo ideal es que no te centres en el contenido calórico de un alimento, sino en su calidad nutricional. Prioriza los granos integrales, la fruta y la verdura de temporada, las grasas saludables y la proteína de calidad. Así pues, es importante que no te obsesiones con cuántas calorías se queman al día y que no olvides mantenerte activo y darle a tu cuerpo el movimiento y el descanso que necesita.